Buscando lograr una mejor y pronta adaptación con el plantel, Eduardo Acevedo, ayer al finalizar la práctica, ordenó una dinámica colectiva en la cual cada uno de los jugadores tenía que disparar a la portería, pero en vez de tratar de anotar gol, los tiros tenían que pegar en el travesaño.

Así, cada uno de los futbolistas hizo sus disparos; algunos como Mauro Cejas, lograron el objetivo en su primer intento; otros como Rubens Sambueza, Diego Jiménez, Giovani Alvarado y Fredy Bareiro, lo hicieron en el segundo y tercer intento, y así poco a poco fueron saliendo de la dinámica los emplumados. Al final, quedaron Juan Carlos Leaño, Gustavo Cabral, Ramón Morales, Elgabry Rangel y Rafael Medina.

Este último, acompañado de Ramoncito y Elgabry Rangel, salieron en la misma ronda y todo quedó entre los dos centrales. Primero le tocó el turno al Cheto, quien consiguió pegarle al travesaño. Con la presión a tope, pues todos los compañeros a un costado del campo comenzaron a gritarle; Gustavo Cabral estaba obligado a imitar a Leaño para seguir con vida, pero su disparo tuvo un destino equivocado.

El argentino tiró al arco, pero el balón, en vez de estrellarse con el larguero, entró a gol. Las bromas, las burlas y los gritos fueron inmediatos para Cabral, quien deberá pagar un asado al plantel, por haber sido el perdedor.