"No me extraña", asegura categórico Joel Sánchez. El tema es Ramón Morales y los últimos episodios que ha vivido el michoacano en Chivas, donde todo indica que lo quieran orillar a salir del equipo a como dé lugar.

Y es que Joel, en la cúspide de su carrera con el Guadalajara, decidió un día de diciembre de 2003 dejar al Rebaño por las serias diferencias que tenía con Jorge Vergara. El Tiburón le renunció como capitán del equipo y prefirió salir de la institución pese a tener contrato vigente.

Hoy, a la distancia, únicamente con su experiencia personal y siempre como discreto espectador de lo que ocurre en el equipo de sus amores, Sánchez Ramos revela lo complicado que es estar sujeto a los designios de Vergara Madrigal.

"Mira, es complicado tenerlo como jefe porque tienes que decir lo que él quiere escuchar", afirma de entrada y a sabiendas del terreno en que está a punto de entrar. "Si él dice que el color blanco es negro, tienes que decirle que el blanco es negro si no tú estás mal. Él siempre tiene la razón y no, así yo no podía seguir. No te puede pasar por encima en ese tipo de situaciones, ya no como profesional, sino como persona".

Es por eso que el Tiburón tiene un recuento que no deja lugar a dudas. "Yo fui el primero que salió mal de Chivas, pero mira, son varios emblemáticos que han salido mal: Benjamín Galindo, Alberto Guerra, el Yayo de la Torre, Omar Arellano, el Chepo, ahora Ramoncito. Todos ellos son gente que siente los colores del Guadalajara y a la que no valoraron, digo, ahí están Daniel Guzmán, Chepo, Galindo jugando finales con sus equipos. Creo que falta un poco más de respeto hacia la gente que le dejó algo al club".

Y es que Joel no olvida el manoseo a la dignidad de ése plantel del que formó parte en los tiempos en que Vergara consiguió el control del Club Guadalajara. "De entrada arrancó como hasta ahora, con esa soberbia que le caracteriza. Estábamos a medio entrenamiento, llegó y se metió a la cancha a parar la práctica, y pues hay que respetar el tiempo de la gente. Te digo, está acostumbrado a que se haga todo como él quiere, tenga o no la razón y la verdad es que hay que respetar a las personas, porque él es el dueño del equipo, pero no de tu persona, por eso insisto en que hay que darse su lugar. Siempre dije que si quieres sentirte de la elite del futbol, tienes que jugar en Chivas. Pero también digo ahora que si quieres decepcionarte del futbol, tienes que ir a Chivas".

¿El problema de Chivas es Jorge Vergara?

"Yo te hablo de lo que yo viví, para mí sí, por lo mucho que habla, si apareciera menos sería mejor para todos, hasta más tranquilos trabajarían los muchachos. Tendría que ser más humilde y más ubicado. Ojalá a Rafael Lebrija le dieran toda la autoridad en la toma de decisiones porque es fundamental que alguien lo asesore", sentenció.